La llama olímpica solía representar la armonía entre los países. Hace unos días, las autoridades la apagaron a su paso por París para salvar la antorcha de posibles agresiones por manifestantes contra la represión china en el Tíbet.
Es un aviso serio a Pekín: si quiere normalidad en sus Juegos Olímpicos, debe abrir la mano en el Tíbet.
Los Juegos, más que un espejo en el que brille la nueva China, deben ser también una ocasión para que ésta se tome en serio una mayor apertura en materia de libertades.
Y es que China, NO es un país TOLERANTE. China es a día de hoy un régimen totalitario que oprime a millones de seres humanos.
Esto me lleva a una reflexión. ¿Se deberían boicotear las JJOO? ¿Qué es más importante, la realización de unos JJOO o el respeto a los derechos humanos?
Creo que deberíamos intentar separar DEPORTE de POLÍTICA (cosa nada fácil, y un buen ejemplo lo tenemos en Joan Laporta, el presi del Barça, que cuando suena el himno español no deja salir a sus benjamines al campo hasta que éste termina....lamentable); pero a lo que iba, realmente ¿se puede separar? ¿Podemos mirar hacia otro lado y hacer como si no pasara nada en Tíbet y en China, mientras vemos a los deportistas correr, nadar...?
Por un lado pienso que para qué serviría boicotar unos JJOO, cuando cada año hay cientos de acontecimientos deportivos y sigue habiendo guerras, hambre, enfermedades.... y nadie quiere poner remedio a eso, por eso repito, ¿juego olñimpico? 0 ¿políticos?
Sin embargo, por otro lado, también pienso que deberíamos boicotar, obstaculizar (como quieran) estos juegos y que el mundo occidental de una lección de Derechos Humanos a China.
Pero, si lo que queremos es que aumente el respeto de los Derechos Humanos en China, ¿el boicot es la mejor manera? Posiblemente, el boicot sin más, lo único que conseguirá es que el gobierno chino utilice el victimismo para fomentar el nacionalismo chino.
Los Juegos, más que un espejo en el que brille la nueva China, deben ser también una ocasión para que ésta se tome en serio una mayor apertura en materia de libertades.
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